No entiendo, a veces, si mis paso son correctos o malos. Uno, a veces es engañado por el destino, y nos convence de tomar una mala decisión, una decisión que puede traer alegría para el ahora, y no para el mañana.
No para toda la vida.

No sé si las decisiones que estoy tomando ahora me darán la felicidad que tanto espero. Al menos estoy más feliz que hace muy poco tiempo.

No sé si todo durará para siempre, antes ni me permitía el pensar que así sería, ahora dejo las manos alzadas para que la vida me de lo que tenga que recibir. Si es eterno, o no, definitivamente no importa.

Aprendí, con muchas caídas y heridas, que lo importante es sentir, con el verdadero corazón, y dejarse iluminar por los momentos. Si es que dura segundos, horas, o años, no importa... porque si te hicieron feliz, estarán por siempre en tu memoria, y ahí, todo es eterno.

No sé a cuántas personas les he hecho el bien o el mal, o ambas.

Pero sé, a quienes jamás quiero hacérselo.

No sé... infinitas cosas.

Pero sé, que quiero ser una mejor persona.