Dolor...
domingo, mayo 15, 2011Soy alguien arrogante, debo admitirlo, lo soy cuando los conocimientos emanan sin control por mis poros, lastimeramente, agresivamente, atropellando gente, pensamientos, sentimientos y sueños.
Mi voz acompaña esa presión de superioridad, mi corazón se queja cada vez que ella habla...es que después de cada palabra, viene el arrepentimiento, la tristeza y el dolor.
Cuando estoy sola, en algún rincón de mi habitación, lloro, lloro sin parar, odiándome, hasta repudiarme completamente; nadie lo sabe, mi caparazón, mi armadura es demasiado teatral y creíble como para darse cuenta de lo que realmente soy, o como realmente me siento.
Quizás las palabras expresan resentimiento, son emociones que mi boca agresiva no puede admitir...se rebajaría completamente ¿en qué lugar quedaría la "excelente persona" que soy? Porque claro, la debilidad, el ser vulnerable, no es propio de una persona experta...sentirse superior es casi una obligación que destruye a la gente, la sociedad, el medio obliga a sentir ese tipo de cosas para sobrellevar la vida, obliga a abandonar ideales, el sentido y nuestra alma.
Yo perdí todo eso, de hecho mi corazón escapa, cada vez que deseo encontrarlo.
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